Esferas Chinas
Ayer pase la tarde reorganizando mi armario y encontré mis preciosas esferas chinas, un regalo fabuloso que me hizo mi gran amiga Shyomi en un viaje maravilloso, lleno de aprendizaje. Pase la tarde manipulándolas, tratando de traer a mi mente toda la explicación y significado que mi amiga me dio sobre las mágicas esferas.
De seguro alguna vez has tenido alguna entre tus manos, son famosas porque combaten el stress, pero además de sus propiedades de relajación; también tienen efectos terapéuticos; ayudan a la concentración y meditación. Contienen un diapasón que emite un sonido vibratorio con cada movimiento y que ayuda a alinear nuestros chakras y armonizar con nuestro entorno.
Las esferas chinas o Kung Fu Chio provienen de la ciudad de Baoding en China, famosa por la longevidad de sus habitantes. Fueron utilizadas por primera vez por la Dinastía Ming, que gobernó China desde el año 1368 y con el paso del tiempo se hicieron populares por todo el continente asiático y ahora por todo el mundo.
Según la medicina china, los movimientos que hacemos con las esferas activan los puntos de energía ubicados en las manos que conectan con los distintos órganos del cuerpo humano, eliminando los bloqueos de energía y ayudando a fluir el Chi, que es la energía sagrada.
Las manos son nuestra conexión con lo espiritual y sus zonas de concentración energética conectan directamente con nuestros chakras o puntos de energía. La zona abultada debajo del pulgar, se conecta con el chakra raíz, en el que actúan las fuerzas de autoafirmación, es la zona de la vitalidad. En el centro del borde inferior externo de la mano, se conecta con el chakra sacro o sexual, en donde actúan las fuerzas de la percepción sensorial, es la zona de la intuición. En la zona central se concentra la mayor energía se conecta con el chakra del corazón, es la zona de la comunicación, de la compasión y los impulsos. En la zona central, debajo del dedo índice se conecta con el chakra plexo solar, detrás de la boca del estómago, es la zona de la percepción y la fuerza del ego. El centro ubicado debajo del dedo meñique, comunica con el chakra de la garganta, que es la zona del lenguaje, el autoconocimiento y lo espiritual.
Para utilizarlas correctamente, debemos tomar las dos esferas en la palma de la mano y moverlas de forma circular, en la mano derecha en sentido de las agujas del reloj y en la izquierda en sentido antihorario. Aumenta la velocidad gradualmente, utilizando siempre una sola mano, no deben golpearse ni dejarlas caer. Este ejercicio estimula la circulación sanguínea, reduce la fatiga y la depresión, alivia preocupaciones, aumenta la energía, reduce la presión sanguínea alta y alivia la artritis en las manos, ayuda a mantener activa la memoria e incluso aumenta la posibilidad de ser más longevo según la tradición china.
Trata de practicar con las esferas todo el tiempo que puedas. Si te concentras en la respiración y aquietas tu mente pueden ayudarte a meditar. Desde que me reencontré con mis bellas esferas, no puedo dejar de hacerlas rotar, de hecho ahora mismo mientras escribo este post las tengo girando y armonizando con mi entorno.
Imágenes tomadas de Internet
- La Divinidad en Hozier - 13 julio, 2024
- La Infoxicación y las Relaciones Interpersonales - 26 junio, 2024
- Gente Gentil - 17 junio, 2024