Hoy mientras estaba en la peluquería, no pude evitar escuchar la conversación de dos mujeres jóvenes que hablaban acerca de la infidelidad, ellas la describían como una traición, falta de amor, deshonestidad, además afirmaban que si alguien es infiel una vez, repetirá el patrón indefectiblemente. Mencionaron frases como «aquel que lo hace una vez, lo repetirá», «cuando un jarrón se rompe, no queda bien aunque trates de reconstruirlo», entre otras. Si has vivido una experiencia similar, este post es para ti.

Estoy de acuerdo en que la infidelidad es una experiencia que nos produce un dolor muy profundo, pero además creo que es un episodio del que somos capaces de recuperarnos sol@s o en pareja. También es cierto que después de una infidelidad, la relación no vuelve a ser la misma; pero esto no siempre tiene que ser negativo, creo que es el momento en donde se pasa a otro nivel. En este punto pueden suceder dos cosas, terminarla o trabajar en un nuevo comienzo. Y eso solo dependerá de ti!

Será inevitable sentir desconfianza, decepción y rabia, es un episodio que marca nuestras vidas porque nos hiere, ataca a nuestra autoestima; pero creo que la decisión de continuar o no, tiene que ver con escuchar la voz de nuestro corazón, al margen de las opiniones de los demás, solo tú sabrás lo que debes hacer. No creo que perdonar una infidelidad sea señal de debilidad o falta de amor propio; todo lo contrario, creo que requiere de mucha inteligencia emocional y control del ego.

A veces el dolor y el miedo se confabulan e impiden que reaccionemos; quiero decir que tal vez sospechábamos que algo ocurría pero nos lo negamos, porque nos aterraba enfrentar la realidad. Como ya he mencionado antes, el perdonar o no una infidelidad es una decisión muy personal; no estoy a favor ni en contra; pero escribí este post con la intención de enfocarnos en nuestro proceso de sanación.

Lo primero que debemos analizar son las causas; la infidelidad es un indicador de que algo está fallando en tu relación; mas allá de culpar o sentirte culpable; necesitas identificar aquello que no está marchando bien. No se trata de buscar una justificación, sino de detectar los espacios que se han descuidado. Es fundamental entender que vivir una experiencia de este tipo significa un nuevo comienzo personal o de pareja, si así lo decides.

Antes de tomar una decisión respecto al futuro de tu relación, tómate un tiempo para calmarte y evaluar la situación, conéctate con la naturaleza y respira, no dejes que tus lágrimas impidan tu visión, medita para canalizar el dolor y déjalo ir, sé que esto es muy difícil porque sientes que no te merecías pasar por esto, pero recupérate, ha sucedido y tienes que enfrentarlo!!!. Cuando te sientas preparad@ conversa con tu pareja, recuerda que se han desconectado, así que tu actitud debe ser asertiva para conectar con su alma, luego podrás tomar una decisión consciente.

Las relaciones de pareja se basan en el amor y la confianza y cuando dos personas deciden unirse asumen un compromiso; cuando existe una infidelidad puedes pensar en que se acabó el amor y el respeto. Pero debes pensar también que el amor se alimenta día con día y que debe reafirmarse a cada paso que damos. El amor también es aceptación, que tiene que ver con saber perdonar y trascender a las vicisitudes que se nos presentan en nuestro camino de aprendizaje.

Muchos excusan las infidelidades como una debilidad, un error que no se pudo evitar y muestran su arrepentimiento prometiendo que no volverá a suceder. Solo tú puedes evaluar la situación, y saber si eres capaz de perdonar de sacar el resentimiento de corazón para abrirte a una nueva oportunidad, creo que es un aprendizaje personal y de pareja. Aquí también es importante mencionar que si la infidelidad es repetitiva, ya se trata de un patrón de comportamiento que puede volver toxica la relación.

Si has decidido perdonar una infidelidad, no debes sentirte débil ni una dependiente emocional; piensa que tu corazón guía tus acciones y que te estas regalando la oportunidad de comenzar de nuevo tu relación. Trabaja en reconciliarte de corazón, en no reprochar, en no tratar mal, en no herir, ni en venganzas personales que no te llevaran a ninguna parte. Cada vez que quieras expresar tu rabia, dolor y resentimiento, hazlo pero no contra tu pareja. Cuando sientas que no resistes la pena y el dolor, busca compañía de un amig@, herman@ o incluso puedes hacer alguna terapia para recuperarte.

Quien fue infiel debe tener la docilidad de reconocer su error y establecer su plan de enmienda, debe procurar recuperar la confianza de su pareja. Debe ser consciente de la importancia de cuidar la relación de pareja. Si estás del otro lado y te fueron infiel, debes aprender de lo vivido; comprobar si tu amor es capaz de perdonar, esto requerirá mucho coraje y entrega. Ambos deberán reconstruir su relación, cambiar sus dinámicas y ser comprensivos, cuidarse mutuamente, trabajar en su sanación y ser muy amorosos.

Si han decidido sanar juntos, deben ser consecuentes, asumir su compromiso con amor y sobretodo tener mucha paciencia porque es un proceso largo. Recuerda que la infidelidad es un problema de a dos, no hay un culpable y una víctima; hay un problema de percepción de los dos. La idea es desarrollar estrategias que los ayuden a superar los obstáculos, con madurez para ampliar su consciencia para que la relación evolucione hacia el amor, el apoyo, la colaboración, el respeto, la amistad, la complicidad, la lealtad.

Si te ha tocado vivir este episodio de infidelidad asúmelo como parte de tu proceso de aprendizaje. Sosega tu ego, enfócate en el amor y encuentra la respuesta que te guiará hacía la mejor decisión. Si decides sanar sola porque consideras que no eres capaz de superar el tema en pareja, también estará bien. Vive tus procesos con amor, eres un ser resiliente, capaz de superar todo aquello que se te presente. Establece tus límites emocionales, no guardes rencor ni resentimientos en tu corazón y sigue adelante con lo que te toca aprender.

Ilustraciones tomadas de Internet

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