Leyes Universales
Siempre he pensado que todo en nuestras vidas tiene una razón y un tiempo perfecto; tal vez no podamos comprenderlo inmediatamente, pero si lo analizamos podremos comprender que tiene mucho sentido. Hoy quiero hablarte de los siete principios básicos que rigen el Universo, son conocidas como las leyes universales y si logramos interiorizarlas, conseguiremos un absoluto dominio personal y armonizar con nuestro entorno, convirtiéndonos en seres plenos y honestamente felices.
Los Siete Principios Universales fueron escritos por Hermes Trismegisto en la obra El Kybalion, libro muy antiguo, que leí hace algunos años y que debo confesar es bastante complicado de entender por sus múltiples datos de metafísica, postulados de transmutación de la mente, filosofía magia, alquimia, astrología y hechizos.
Más allá de los enunciados del libro, de los cuestionamientos y polémicas que haya generado a través de la historia; creo que la filosofía Hermética es muy valiosa. Los siete principios o leyes de equilibrio universal que postula, nos conducen por el sendero del conocimiento, la construcción de una vida en armonía. Tal vez hayas oído acerca de estas leyes, que determinan los procesos de creación, manifestación y administración del universo. Y que a diferencia de las leyes de los hombres que varían continuamente de acuerdo a las circunstancias, las leyes universales son principios inmutables que dan el origen y el orden perfecto a todo lo que existe en el universo.
1- Ley del Mentalismo o Ley de la Atracción, sostiene que «el TODO es mente; el universo es mental». Solo tú eres el productor de todo lo que te suceda; todo depende del clima mental en que vives. Tenemos libre albedrío de escoger el bien o el mal, lo negativo o lo positivo. Lo que tú esperas que suceda, lo que tú decretes que suceda, sucederá. Lo que niegues, no ocurrirá. La ley de la Atracción es como un bumerán, nuestros pensamientos crean nuestra realidad, lo que emitimos ahí fuera, consciente o no, conforma lo que atraemos hacia nosotros.
2- Ley de Correspondencia, sostiene que «como arriba es abajo, como abajo es arriba». Toda acción y toda condición tiene su analogía o su correspondencia. Hay muchos planos que no conocemos, pero cuando aplicamos la ley de correspondencia , lo incomprensible se vuelve claro a nuestra conciencia. El conocimiento del principio de correspondencia habilita al hombre a razonar de lo conocido a lo desconocido.
3- Ley de Vibración, sostiene que “nada está inmóvil; todo se mueve, todo vibra”. Este principio explica las diferencias entre las diversas manifestaciones de la materia, de la fuerza, de la mente y aun del mismo espíritu, las que no son sino el resultado de los varios estados vibratorios. Todo está en vibración: cuanto más alta es esta, tanto más elevada es su posición en la escala. La vibración del espíritu es de una intensidad infinita.
El pensamiento positivo vibra a una frecuencia altísima. Sus colores son brillantes, claros, luminosos. El pensamiento negativo vibra lentamente y sus colores son opacos. Cuanto más negativos, tanto más sombríos y tanto más bajo el «tono» de su sonido.
4- Ley de Polaridad, sostiene que “todo es doble, todo tiene dos polos”. El valor puede transmutarse en miedo y viceversa. Las cosas duras pueden tornarse en blandas y así sucesivamente, efectuándose siempre la transmutación entre cosas de la misma clase, pero de grado diferente.
Tratándose de un hombre cobarde, si se elevan sus vibraciones mentales a lo largo de la línea miedo- valor, se llenará de valentía. También lo perezoso puede hacerse activo y enérgico, polarizándose simplemente a lo largo de la línea pereza- diligencia. Los estados mentales pertenecen a innumerables clases, cada una de las cuales tiene su opuesto, y a lo largo de su propia línea es posible la transmutación.
5- Ley del Ritmo, sostiene que “todo fluye y refluye”; todo tiene sus períodos de avance y retroceso, todo asciende y desciende; todo se mueve como un péndulo; la medida de su movimiento hacia la derecha, es la misma que la de su movimiento hacia la izquierda; el ritmo es la compensación.
Este principio encierra la verdad de que todo va de ida y vuelta; en todo se manifiesta una oscilación media, un movimiento semejante al del péndulo de uno a otro polo.
Todo tiene su propio ritmo. También lo vemos en todas las fases de la humana actividad. Las mareas de la vida fluyen y refluyen de acuerdo con la Ley, y así vemos suceder nuestros estados de ánimo fluctuantes, nuestros sentimientos, nuestros estados mentales. Vemos que empezamos algo con gran entusiasmo que no sabemos cuándo ni por qué decae, y luego vuelve y así nos va manejando este principio porque él, como toda ley, es inmutable. Todo tiene su tiempo, ni antes ni después; todo llega cuando tiene que llegar!
6- Ley de Causa y Efecto, sostiene que “toda causa tiene su efecto y todo efecto tiene su causa”; todo sucede de acuerdo a la ley. No existen casualidades, no pueden existir porque no existe la ley de la casualidad. Si piensas o hablas mal de alguien, es negativo; lo has sembrado en polo negativo, dependiendo de la cantidad de maldad que contiene, recoge en su camino cantidad de esa energía y te regresa aumentando en fuerza; como consecuencia ocurrirá algo desagradable. Si criticas, serás criticado, si dañas a alguien o a algo, serás dañado o algo tuyo sufrirá un daño; si eres injusto, esa injusticia se te devuelve. Esas causas que siembras tienen que dar su fruto en efectos, antes de que quedes libertado. Si siembras discordias, tienes que recoger discordias; si siembras bondad, amor, ayuda, tienes que recoger bondad, amor, ayuda. Lo que siembres, que sea constructivo o destructivo, lo verás devolverse.
7- Ley de Géneración, sostiene que «el género existe por doquier; todo tiene su principio masculino y femenino»; juntos son el complemento perfecto. El género se manifiesta en todos los planos. Cada ser contiene en sí mismo los dos elementos de este principio. A cada minuto generamos la realidad que nos rodea. Nuestros pensamientos , acciones y palabras de hoy son las semillas del fruto que recogeremos en el futuro.
Ahora que ya conoces un poco mas acerca de las leyes universales; proyecta tu vida y trata de aplicarlas, te aseguro que podrás comprobar que todo pasa por alguna razón, que el tiempo puede ayudarnos a comprender y de seguro te convencerás que tu fuerza interior es capaz de luchar ante cualquier adversidad.
Imágenes tomadas de Internet
Fuentes de consulta:
-Revista SYMBOLOS, Nº 11-12: “Tradición Hermética”, Carta Editorial. Guatemala 1996.
-http://www.tradicionhermetica.com/
- La Divinidad en Hozier - 13 julio, 2024
- La Infoxicación y las Relaciones Interpersonales - 26 junio, 2024
- Gente Gentil - 17 junio, 2024