7 mayo, 2018 por

Nuestras Acciones También Cuentan para Salvar el Planeta

Estamos plagados de noticias acerca del calentamiento global, el cambio climático,  la contaminación, la depredación de los recursos naturales, la extinción de animales, la falta de agua en el planeta. Nos alarmamos, buscamos culpables, esbozamos soluciones que dejamos en manos de los políticos; pero seguimos como meros espectadores; No somos capaces de tomar acción y dejar de ser indiferentes a lo que ocurre a nuestro alrededor.

El mundo no puede sostener el estilo de vida que millones de personas llevamos, sin conciencia de que somos nosotros quienes estamos acabando con el planeta. Es hora de dejar de cerrar los ojos y  mover la cabeza; es momento de hacer un gran cambio porque hay mucho que podemos hacer!!

Quiero compartirte algunas acciones cotidianas que tendrán un gran impacto en el cuidado de nuestro planeta:

Reduce tu huella digital;  toda la información que guardamos en el email y en la nube está ocupando espacio en centros de información alrededor del mundo cuyos servidores producen mucho calor, se  requieren grandes cantidades de energía y aires acondicionados para que los equipos no colapsen. Para reducir la carga de estos enormes edificios que producen calor, conservemos solo la información que nos hace falta. Por ejemplo, Si eliminamos 30 correos de nuestra cuenta de correo, ahorraríamos la energía equivalente a una bombilla encendida durante 24 horas.

Restringe el consumo del aire acondicionado, muchas oficinas, centros comerciales y supermercados abusan del uso de estos equipos y no se preocupan por el impacto que causan en el calentamiento global. Por ello, es muy importante que empecemos por casa; pensemos más allá de nuestra comodidad. Si utilizas la frase “Deja el aire prendido para encontrar la casa- habitación fresquita”, cambia el hábito y utilízalo solo cuando sea necesario. Lo mismo aplica para la calefacción, baja un grado al termostato y marcarás la diferencia

Evita utilizar productos químicos en el hogar, elige productos orgánicos.

Acostúmbrate a reciclar el plástico, papel y vidrio.

Cuida el agua, cierra el grifo cuando te cepilles los dientes, cuando laves la loza, cuando te bañes… Haz todo lo que puedas para no desperdiciar el agua.

No eches desperdicios en la calle, ni en el mar. Estudios aseguran que si seguimos contaminando en el año 2050 habrán mas desechos plásticos que peces en el mar.

Consume alimentos orgánicos y en la medida de lo posible evita los que contienen empaques de plástico. Apoya a los productores locales y visita las ferias orgánicas en tu ciudad.

Piensa en reducir la compra de ropa y accesorios innecesaria. Los grandes centros comerciales ofrecen ofertas tentadoras con productos muy baratos, pero de mala calidad; lo que significa que durarán poco y tendrás que seguir comprando y acumulando. Compra solo lo necesario, piensa que tus decisiones tienen impacto en el mundo.

No consumas aceite de palma en ninguna de sus variaciones. Indonesia y Malasia producen el 90% del aceite de palma en el mundo, por culpa de estas plantaciones arden los bosques y millones de orangutanes y elefantes están desapareciendo. Además  es pésimo para la salud y el medio ambiente.

Reduce el consumo de carne, no voy a decirte cual es la dieta que debes  seguir; pero si te diré que la carne animal es uno de los principales contaminantes del mundo y de la salud, su producción causa un fuerte impacto en los bosques y en la emisión de gases tóxicos.

Aléjate de las críticas, porque eso no cambia las cosas. Deja de tener actitudes arrogantes como “yo pago, por eso prendo todas las luces de mi casa”, “Yo pago para que limpien las calles”.

Deja de pensar que cambiar tus hábitos no tendrá consecuencias. Si nos hacemos más conscientes y actuamos con amor y respeto al planeta todo cambiará, porque nuestras acciones tienen gran impacto y cuentan mucho para salvar el lugar en donde vivimos!!

Ilustraciones tomadas de Internet
Dulcinea
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